-----85

Pastoral

21 febrero, 2024 / Carmelitas
Radiografía del soplo del Espíritu

Las propias noticias de la actividad en nuestras parroquias y comunidades reflejan el protagonismo que adquieren movimientos como Efetá, Hakuna, Emaús, grupos de oración de madres… Baste señalar como indicio de ello el entrañable memoria que guardamos y celebramos por el admirable testimonio de nuestro querido hermano Pablo en Salamanca.

Tal vez, para algunos, todavía esos nombres resulten un tanto desconocidos. ¿De qué va el asunto? ¿A caso tienen algo en común las iniciativas que al menos alcanzan a tocar el corazón y el alma de muchos entre medio de tantas multitudes ante las que a menudo nos vemos impotentes, nos sufrimos ineficaces cuando intentamos proponerles el anuncio del Evangelio?

No deja de ser sintomático que, con más o menos acierto, un medio de prensa digital se tome la molestia en recoger las conclusiones de un acercamiento, por no llamarle en rigor “análisis”, a las dinámicas, pedagogías, perspectivas, formas que caracterizan en común estos “movimientos”, o “experiencias de retiro” que persiguen provocar el retorno al amor primero. Nos permitimos citar un extracto tomado de “El Debate”. El artículo entero puede verse en su sitio WEB, aquí.

Los 6 rasgos comunes

A pesar de sus múltiples diferencias, es posible encontrar, al menos, 6 rasgos comunes compartidos por todas estas nuevas realidades evangelizadoras:
    • Cuidado por la liturgia
En contraste con los abusos litúrgicos de las últimas décadas, que han llevado incluso al Dicasterio para la Doctrina de la Fe a publicar la reciente Nota «Gestis Verbisque» para acabar con la «multiplicación» de estos «actos gravemente ilícitos» que incluso «pueden invalidar los sacramentos», estos nuevos movimientos muestran un singular cuidado por la liturgia.
Los cantos, las lecturas, las vestimentas sacerdotales y la participación de los fieles no están libres de sus notas personales –particularmente original es el caso de los impulsados por la Renovación Carismática, que ha llevado al Papa Francisco a bromear con ellos como si fuesen una «escuela de samba»–, pero en todos los casos se respetan de modo escrupuloso las rúbricas prescritas por la Iglesia.
No hay, por tanto, poemas de Tagore sustituyendo a los Salmos, ni manteles de cuadros sobre el altar, ni laicos fingiendo consagraciones, ni sacerdotes sin estola celebrando la Eucaristía o en el confesionario…
    • Búsqueda de la belleza
Como respuesta a la «cultura del feísmo» que se ha instalado en la sociedad y de la que participa «la fealdad de ciertas iglesias y de su decoración» según denunció el Pontificio Consejo para la Cultura en su documento Via Pulchritudinis, las nuevas realidades evangelizadoras se caracterizan por una búsqueda sensible de la belleza.
Tal vez sea Hakuna quien mejor encarna esta característica, que ha transmitido como por contagio no sólo a otros movimientos, sino también a parroquias, grupos de oración y de catequesis, etc. Dentro de las propias comunidades católicas es frecuente escuchar, con más agradecimiento que recelo, comentarios sobre la «hakunización» de los grupos de jóvenes.
Oraciones a la luz de las velas, composiciones musicales producidas de forma profesional, Horas Santas con focos en torno al Santísimo, imágenes y láminas que mueven a devoción y que huyen tanto de lo kitsch como de lo mediocre, cartelería más cercana al marketing que a las típicas cartulinas de tablones de anuncio parroquiales… Todo cuenta para hablar a una sociedad acostumbrada a lo emocional, desde la conciencia de que la belleza acerca a Dios.
    • Comunidad
Frente a la «idolatría del yo» y al «individualismo radical» tantas veces denunciados por el Papa Francisco –la última ocasión, el 10 de febrero a propósito de la canonización de la primera santa argentina, Mamá Antula (https://www.vaticannews.va/es/papa/news/2024-02/papa-peregrinos-argentinos-por-la-canonizacion-de-mama-antula.html)–, las nuevas iniciativas evangelizadoras enfatizan su carácter comunitario.
La imagen más emblemática de este aspecto es la de las clausuras de los retiros de Emaús, Effetá o Bartimeo, con los asistentes abrazados y cantando a coro, acogidos por quienes han hecho con anterioridad la misma experiencia e incluso llevando la misma camiseta blanca –un símbolo que busca recordar la importancia del Bautismo para iniciar una nueva vida desde la Gracia de Dios–.
Además, no pocos de estos gestos recogen prácticas eficaces para generar sentimiento de pertenencia, pero que habían sido abandonadas durante años, o mantenida sólo en algunos grupos: los estandartes de Acción Católica, la acogida comunitaria de Cursillos de Cristiandad; los himnos de ciertas congregaciones…
    • El mensaje de siempre
Ni Agenda 2030, ni revisionismo sinodal, ni oraciones por el planeta, ni las «colonizaciones ideológicas» denunciadas por Benedicto XVI y por el Papa Francisco: el corpus doctrinal que comparten las nuevas realidades que propician miles de conversiones cada año en España es «el de toda la vida», el expresado en las Escrituras, la Tradición y el Magisterio de la Iglesia.
Con el Catecismo como brújula para despejar todas las dudas e inquietudes de aquellos que se acercan a la fe católica –en muchas ocasiones incluso por primera vez–, estos movimientos tratan de encarnar aquello que más de 300 veces reclamó Juan Pablo II desde que habló por primera vez de «nueva evangelización» ante la Asamblea del CELAM en 1988: «Una evangelización nueva en su ardor, en sus métodos y en su expresión», pero «proponiendo sin ambigüedades la doctrina de la Iglesia».
    • La fuerza del testimonio
Eso sí, aunque el mensaje sea «el de toda la vida», hay un matiz crucial que comparten lo mismo las «enseñanza» de un Seminario de Vida en el Espíritu, que en las dinámicas de Encuentro Matrimonial, o en las charla de Emaús: la expresión predominante no es la exposición teórica de los preceptos de la Iglesia, sino el testimonio personal de católicos corrientes que tratan de vivir la fe con coherencia, aunque de modo imperfecto, en su día a día y en sus entornos cotidianos.
En algunos casos se trata de testimonios desgarradores, sorprendentes o heroicos, pero la mayor parte de las ocasiones son personas normales y corrientes, con vidas ordinarias, las que muestran cómo vivir la fe en el mundo de hoy. Algo que provoca un sentimiento de empatía entre los que escuchan, y un estímulo para su propia vida de fe.
Tampoco esto es algo nuevo para la Iglesia. De hecho, mucho antes de que Google y Amazon se diesen cuenta de lo importante que son las reseñas personales para convencer a los usuarios de las bondades de un producto o de un mensaje, ya había señalado Pablo VI en 1975 que «el hombre contemporáneo escucha más a gusto a los que dan testimonio que a los que enseñan, o si escuchan a los que enseñan, es porque dan testimonio». Y enfatizaba: «Para la Iglesia, el primer medio de evangelización consiste en un testimonio de vida auténticamente cristiana».
    • Lo más importante: el Santísimo
Y aunque todo lo anterior sea santo y seña de todos estos nuevos movimientos evangelizadores, tal vez el rasgo más importante y compartido sea el cristocentrismo. Más en concreto, la centralidad de la Adoración Eucarística y el reconocimiento de la presencia real de Jesucristo durante la Eucaristía y en el Sagrario.
Si bien esta conciencia es algo nuclear de la fe católica desde sus orígenes, la secularización de las últimas décadas dentro de la propia Iglesia ha llevado a extremos como que, por ejemplo, 7 de cada 10 católicos de Estados Unidos no crean que Jesús se hace presente en el pan y el vino de la misa, como revelaba un estudio del Pew Research Center en 2019.
La respuesta de estas nuevas realidades al «abandono casi total del culto eucarístico» que ya denunció Juan Pablo II en Ecclesia de Eucharistia ha sido radical: poner a Jesús Eucaristía en el centro de todas sus actividades.
Los ejemplos de cómo el Santísimo es uno de los ejes centrales de cada uno de estos encuentros evangelizadores sobreabundan:
      • los esposos rezan ante Jesús sacramentado tanto en PAC como en Encuentro Matrimonial, Forta o Familias Invencibles;
      • los jóvenes y adolescentes de Lifeteen, Bartimeo o Effetá se postran ante la Custodia para rezar;
      • mientras se desarrolla un retiro de Emaús, el equipo que lo organiza se turna ante el Sagrario para orar por quienes están participando en él;
      • e incluso en los conciertos que Hakuna ha celebrado en el Wizink Center o en la plaza de Vistalegre se habilitaron y dignificaron escoberos o camerinos para que la Hostia estuviese expuesta (y acompañada) mientras sobre el escenario se desarrollaba el espectáculo.
Búsqueda de la belleza, respeto a la liturgia, vida en comunidad, la enseñanza del Magisterio, testimonio personal y conciencia de que Jesús está en la Eucaristía: tal vez lo más transgresor de estas nuevas realidades que generan miles de conversiones cada año sea… no abandonar aquello que siempre ha funcionado.

 

 

Galería de imágenes

Volver
ACCESO PRIVADO
Regístrate para acceder al área privada

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies